Uno de los mitos que existe en democracia es él de «el voto útil». Yo mismo he cambiado varias veces mi voto creyendo en cada momento que mi voto sería más útil así, pero lo cierto es que los partidos políticos han tergiversado el sentido de ese «voto útil».
Empiezo por el principio: la democracia debería ser «la decisión del pueblo», pero entonces a alguien se le ocurrió la linda idea de las chapitas.
¿Y que es eso de las chapitas?
Pues muy sencillo: la militancia. La militancia supone una bolsa de votos segura para los partidos porque la gente va a las urnas como va al futbol: «viva el betis manque pierda». Eres militante entonces te da igual que el cabeza de lista sea un inutil, un corrupto, un prevaricador, un agresor, o un sinverguenza. Delincuentes en definitiva que serán presentados por el partido como «presuntos» hasta el día de la sentencia y como «víctimas de un complot» a partir de la publicación de la condena. ¿Y como se traduce eso? Pues que te saca completamente de la posibilidad de que tu voto valga para algo. Es decir: ¿Tú estás afiliado al PSOE, al PP, a CIU, al PNV, a IU? Enhorabuena, tú no cuentas en esta democracia. Es decir, tú votas pero en realidad, tu voto no cuenta.
¿Y porqué no cuenta?
Aquí está la cuestión. En España tenemos instaurada un bipartidismo. El PP tiene una bolsa enorme de afiliados, el PSOE otra bolsa enorme de afiliados, y luego están todos los demás. Sin embargo ninguna de esas bolsas llega a la altura suficiente para alcanzar mínimamente la tan deseada mayoría parlamentaria.
Esos votos, los de la bolsa, están asegurados. Las campañas electorales, pese a invitar a los afiliados a los mitines para que vitoreen al lider, están en realidad enfocadas a los demás. La campaña, seamos claros, está enfocada a captar el verdadero voto útil de la democracia y si tú eres un militante la campaña no es para ti.
Todos esos votantes que no están en ninguna de las grandes bolsas, que no tienen teñido su voto de ningún color predeterminado, sino que piensan votar después de reflexionar, que igual votan cabreados (yo lo estoy) o como castigo. Ese grupúsculo de personas es él que realmente mueve la democracia pues será quien le de la mayoría simple o absoluta a alguno de los dos grandes partidos.
Las bolsa de afiliados hacen que ambos partidos estén situados muy por encima que los demás partidos. Pero ya está, no les da más posibilidades. La militancia, para lo único para lo que sirve es para acercar más a un partido a esa ansiada línea, punto. Vale, y para llenar estadios. Los demócratas, los no afiliados, los que votan con la cabeza y no se casan con nadie, esos son los que están situados por encima de esas bolsas y son los que pueden hacer que el montón de votos del PP o el montón de votos del PSOE sea más alto y alcance la mayoría. Por eso los esfuerzos de la campaña están dirigidos a ellos.
Ahora bien, vamos a suponer que todos ese voto inteligente, todos esos votantes con cabeza, reflexionan y deciden que sí, que es cierto lo que dice el 15M que hay que reiniciar la democracia, que es verdad lo que dice ATTAC que los mercados financieros están destruyendo nuestra democracia, que las premisas del FMI está hundiendo nuestras economías y entonces todos esos votantes toman la decisión de votar a otro partido.
Voy a eliminar de mi quiniela a PP PSOE , PNV y CIU que lo unico que hacen estos partidos es encadenar decisiones y rutinas que nos han llevado a la crisis actual, a las anteriores y a las que vendrán.
Pongamos por ejemplo que gran parte de esa masa vota a EQUO o a Izquierda Anticapitalista. Ni EQUO ni Anticapitalistas van a conseguir una mayoría absoluta porque las bolsas grandes de votos de este país están enterradas en los cotos privados del PP y el PSOE pero por otro lado las bolsas de PPSOE tampoco van a crecer. Se van a quedar en el mismo punto en él que estaban antes de empezar esta vorágine de mítines en los que los que deben convencer son aplaudidos por votantes que ya salieron convencidos de sus casas.
Y aqui viene lo interesante de la democracia.
PPSOE, gane quien gane, se verá en la necesidad de dialogar. En la necesidad de hacer un trato con esos partidos minoritarios. A esos a los que han puteado para que no puedan participar en la «fiesta de la democracia» y ahora resulta que se convierten en socios imprescindibles. PPSOE los necesita para que se suban a sus bolsas y puedan tocar la línea de la mayoría y ganar la partida.
Y ese es mi consejo para estas elecciones,
Que hagas de tu voto un voto útil y que votes a un partido pequeño, en él que creas, que tú creas sinceramente que puede cambiar el panorama actual y que le des la llave para formar un gobierno. Ignora los llamamientos de los grandes partidos que braman que los votos les pertenecen y votar al pequeño es un voto perdido.
Vota a ese pequeño partido que colocado encima de la bolsa de votantes de los dos grandes provoquen un cambio en nuestra democracia y obligue a los grandes partidos a hacer algo más de lo que están haciendo y que de una vez resuelvan los problemas acuciantes que tenemos en España y que no son ni los contratos, ni los salarios, ni los funcionarios ni las pensiones sino el capitalismo salvaje y completamente descontrolado que propicia el actual sistema financiero.
Por último, si todo lo anterior no te convence porque eres un acérrimo del PSOE, del PP, de PNV o de CIU entonces miralo por otro lado: Los grandes partidos se han convertido en un fin en si mismos dónde el único objetivo es el poder. Aunque la Constitución Española dicta que deben ser democráticos en su estructura interna lo cierto es que no es así.
Si me haces caso y votas a un partido pequeño obligarás a los dirigentes de tu partido a replantearse lo que está ocurriendo y si además de ello tu partido no consigue la ansiada mayoría es posible que consigas que tu partido se regenere y recupere la senda democrática.